TARTA DE QUESO CREMOSA (con arándanos por encima, que queda bonito. Y además están ricos)

Ya tengo a Frusty en casa!! Como vinimos en coche, y fue un viaje de dos días, pensé que antes de someter al pobre gato a semejante hazaña, iba a estar mejor un mes con mis padres, y después ya me lo traería en avión.

Pues eso hice la semana pasada, me fui a Barcelona  a buscarle, porque qué queréis que os diga, le he echado de menos casi más que a mis amigos humanos (y bueno, ya que estaba en Barna, veía también a esos amigos humanos y me tomaba unas cuantas cervezas con ellos. Y volvía a ponerme chanclas!!)

El día antes de irme pensé en dejarle un pastelito hecho a Javi, ya que el pobre se quedaba aquí solo. Partiendo de las premisas de que tenía poquísimo tiempo, y de que a Javi le encantan las tartas de queso, la opción estaba clara.

Y como no tenía tiempo de hacer coberturas ni nada que se le pareciera, opté por echar un puñado de arándanos por encima y espolvorearlos con azúcar glass. Y para el poco trabajo que da echarle fruta por encima, queda resultona, no me digáis que no.

INGREDIENTES Y PREPARACIÓN

PARA LA BASE

Aunque yo usé unos recortes de masa que me quedaba (si queréis hacer vosotros la masa, la que yo tenía era como la base de esta receta ), os recomiendo usar las muy socorridas galletas machacadas con mantequilla deshecha, es mucho más rápido.

- 15 galletas machacadas

- 35 gr de mantequilla deshecha.

Lo mezclamos todo, y lo apretamos contra el fondo del molde, y a enfriar mientras preparamos el relleno.

PARA EL RELLENO

- 250 gr de queso crema tipo philadelphia

- 2 huevos M

- 75 gr de leche condensada*

- 15 gr de harina

-  la ralladura de un limón bien finita (esto es opcional)

Batimos un poquitín el queso, añadimos los dos huevos uno a uno, y ya ligeramente batidos e integramos.

Añadimos la leche condensada y el limón, la harina  y mezclamos hasta que la masa sea homogénea.

Al horno, precalentado a 175º durante 20-25 minutos.

Dejamos enfriar, desmoldamos, y ya podemos comérnosla.

* Con esa cantidad de leche condensada, queda dulce lo justo (para mi), probad con un dedito un poco, y si lo queréis más dulce, le añadís un poco más

Si le queréis poner una mermeladita con un punto ácido por encima o cualquier fruto rojo, seguro que queda estupenda.

Es tan rica y fácil es esta tarta que la volví a hacer ayer, para darle también un cachito (minúsculo) a Frusty, que se portó tan bien en el avión que se lo merecía.

Espero que os guste (la tarta, porque Frusty es tan mono, que seguro que os encanta!)